lunes, 11 de mayo de 2009

Espeluznante

No hace mucho apareció publicado el vídeo de un asesinato que, por cercano (geográficamente) no deja de ser una muerte más.

Incluso se antoja irrelevante que esa misma noche, en el metro hubiese visto a ambos grupos con pinta de "nada bueno", porque comentarios resultadistas sobran.

En la noticia hablan de que si el asesino ya iba predispuesto a atacar, y le dan una importancia máxima.

Personalmente, si yo fuese un descerebrado extremista sin la fuerza de veinte amigos, y los de la banda enemiga entrasen a tropel en mi vagón, yo también tendría algo a mano, por si las moscas.

Lo importante no es eso.

Lo importante es que una persona muere después de algo que no parece más peligroso que un empujón.

Miro una y otra vez el vídeo, y me resulta increíble lo fácilmente que morimos.

¿Así de simple? Así de simple.

¿Ese tío murió sólo por eso? Ese tío está muerto.

Mierda, habrá que desempolvar las viejas armaduras.





Germanismo del día

Das Leben ist kurz - A vivir, que son dos días

2 comentarios:

Carlos dijo...

uhmmm... Bueno, entiendo por donde vas... Pero EL TIPO QUE ESPERA EN EL VAGON ES UN PUTO NAZI PARACA CON UNA NAVAJA EN LA MANO QUE ESTÁ ESPERANDO LA MÍNIMA PROVOCACIÓN PARA CLAVÁRSELA A ALGUIEN. Hay una diferencia grande entre ambos grupos, no nos engañemos, esto no es un tema de bandas, es un tema de "grupos nazis organizados" y de jóvenes antifascistas que se la juegan de vez en cuando por plantarles cara. Así que amigo Prinzzz... No todos los animales de la granja son iguales, don´t forgive my friend.
En el resto de comentario sobre la fragilidad de la vida te doy la razón, claro... ¡A vivirla!

Beíta dijo...

Tú sabes cómo soy. Sabes donde me muevo.
He visto el vídeo tres veces. No lo había visto antes. Y mejor que no lo hubiera visto (esto ya no se me olvida). El nacionalsocialista ataviado con su preciosa sudadera de ThreeStrokes, lleva la mariposa desde el principio. Eso se llama cobardía.
Hay un "código" y si hay uno solo contra 20, no se hace nada. Quizá hay gritos, hay insultos, se suelta alguna que otra ostia... pero no se llega a apuñalar.
No tiene perdón. Y el ser humano es frágil, lo es, tanto que después de verlo me he echado a llorar. No somos nada.

Por lo demás, he leído todaaaaaaaas las entradas atrasadas, no las había visto anteeees... ¡Escribe más! XD
Un beso, desde Chile.